Hoy en día sigue existiendo gente que está donde no quiere estar, con quien no quiere estar, haciendo cosas que no le satisfacen. Todavía hoy, en los países libres, muchas personas arrastran sus vidas como un lastre por el miedo al qué dirán. Por fortuna siempre ha habido valientes, tachadas de descerebradas, que un día abrieron los ojos y entendieron que su vida no era una obra de teatro, que era posible dejar de representar un papel, que se puede existir con la única protección de uno mismo. El concepto de amor libre va mucho más allá de una simple relación física o sentimental; abarca la totalidad del pensamiento. Y ese es el primer paso hacia la libertad y el cambio. Qué bien lo hizo Tessa Hadley. Qué bien... |