Cerca del fuego

Antes que nada os diré que éste ha sido el libro que más me ha costado leer y reseñar en lo que llevo de año. Quizás soy yo la que no ha sabido apreciar el talento de este escritor y de su novela, pero nadie me rebatirá que es un libro complejo, que debe leerse muy despacio o incluso dos veces para llegar a comprenderlo. No es algo que diga yo porque sí, sino que su propio autor en una entrevista nos advierte.
El libro consta de algo más de 100 páginas, un libro corto en extensión pero que nos presenta una historia muy densa que parece sacada de un guión cinematográfico.
Leandro (un joven aprendiz de mecánico, vulgar pero con una inteligencia y astucia brillante) e Irina (una mujer estrambótica perteneciente a una familia adinerada) nos darán a conocer su historia de amor, algo inusual y exasperante, que deseaba que acabase cuanto antes y que me hizo incluso contar las páginas que faltaban para terminarlo.
Si sois unos lectores a los que os gustan los retos, os animo a leerlo y a comentarme qué os ha parecido, si volveríais a leerlo o no y si os gustan este tipo de libros que te dejan dándole vueltas a la historia una vez terminado.

Delicioso puzzle.
Ha ido de más a menos pues tardé en ser capaz de comprender la dirección de la narración. No quiero desvelar nada ya que el propio descubrimiento de esto creo que merece la pena y es ahí donde, para mi, radica su esencia.
La complejidad de los personajes y la evolución de los mismos también me parece una nota muy positiva de esta historia.
Con todo esto no quiero decir que sea una lectura complicada ni tediosa, ni tampoco una obra que rompa con los cánones o suponga un antes y un después en la vida del lector, pero es mucho más de lo que podía esperar y recomiendo darle una oportunidad.
En resumen, se trata de una historia simple a nivel argumental, pero compleja en cuanto a estructura y matices aunque de lectura fácil. Te lo devoras en pocos días.