Todo arde

Todo arde inaugura una nueva serie con personajes que aparecieron en el universo de Reina Roja, y de los cuales no tenía ninguna memoria y que no encontré tampoco citados en mi reseña sobre el libro.

Esta vez la lectura me sorprendió desagradablemente por su estilo telegráfico, a veces tan escueto que un capítulo es un párrafo. En realidad la novela esta escrita como un script de cine. Solo prevalece la acción.

Y esta novela negra es pura acción, por momentos trepidante, con unas vueltas de tuerca sorprendentes que mantienen la atención del lector, aunque resulten altamente improbables.

Lo que tiene este libro, a mi parecer, es una originalidad en la narración porque el narrador omnisciente, detalla y comenta las ristras de pasos falsos que dan a cada momento las protagonistas del relato. Este elemento agrega una nota de franca hilaridad y de frescura : tenemos una novela-parodia de thriller con tres anti héroes en un anti thriller; en realidad una comedia dulce-amarga de los tiempos actuales, con varias referencias meta literarias hacia la novela de aventuras de Stevenson, La Isla del Tesoro.

LA TRAMA : Un banquero corrupto y prepotente, que se cree inmune por sus relaciones con otros corruptos-inmunes, usa a su mejor elemento laboral, Aura Reyes, para encubrir una jugosa operación secreta con otro banco. Aura Reyes cae en una red de acusaciones con pruebas falsas y debe cumplir una pena por algo que no ha hecho.

En un estado de enajenación total, conocerá a María Paz, una gallega de gran osadía y le propondrá una alianza para vengar su caso y acusar al corrupto y asqueroso banquero. Una tercera mujer vendrá a integrar el equipo, es una ingeniera, hacker de genio y que contribuyó en su tiempo a implicar a Aura en esta cruel tormenta fomentada por el banquero.

La fuerza de la novela son estas tres mujeres, tan dispares, cada una sobresaliente en su dominio, cada una aportando su apoyo a Aura y a su causa. Porque Aura representa lo que ellas nunca han tenido : una ex-estabilidad y una ex-familia.

A partir de la asociación de estas « socias » vengativas, el lector se verá involucrado en una acción al puro estilo de un episodio de Misión Imposible con Tom Cruise. Solo que aquí, casi toda la acción la llevan mujeres y qué mujeres ! No temen a nada y es por eso que son peligrosas, nos dice el autor. Hay que integrar en el club a la ex policía Romero, con unos numeritos dignos de Rambo, de la serie de pelis…

El libro esta lleno de comicidades, chascarrillos, dicen los españoles, hace bien reír. Donde me reí menos, fue con el hablar gallego de la macanuda María Paz, aunque pude traducirlo y entenderlo, pero se me hizo pesado.
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