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Bueno, a ver… ¡puf! Como suelo hacer, empezaré diciendo porqué he leído este libro. Básicamente, vi una mesa llena de libros a 6'95€ y piqué con un par. En estos casos suelo dejarme llevar por lo que me entra por los ojos y ya sabemos lo que pasa cuando hacemos eso. A veces se acierta y a veces no. Y en este caso no acerté. Ni un poquito. Os cuento un poco. Vera, la protagonista de esta historia, trabaja en una oficina con sus dos amigas, un par de compañeros y un jefe machista y repelente. Uno de esos compañeros, Leo, empezará, por arte de magia, a gustarle a Vera y comenzaran una historia avocada al fracaso desde el minuto uno. al tiempo, a Vera le surgirá la posibilidad de trabajar con Andrea que, por cierto, tiene un hermano maravilloso. Total, que básicamente la trama es esta. No quiero destripar más, por si alguien se anima a leerlo, pero en ese caso, no podréis decir que ha sido por recomendación mía. Este libro me ha resultado aburrido, lento y cansino. No os voy a engañar, como a mitad del libro empecé a leer en diagonal y a saltarme la enorme cantidad de reflexiones que hay en todos los capítulos. La gran mayoría de sus paginas me han parecido relleno, y sus personajes… pues tampoco me han gustado. No he empatizado nada con ninguno y me ha costado la vida engancharme a la historia y, como ya he dicho, he acabado leyendo por encima. En definitiva, Mientras dure el verano, es un libro que yo no recomendaría. No diré que esta mal escrito, porque tampoco es el caso, pero es que va de la mano de editorial potente, y si encima estuviera mal escrito ya sería un sacrilegio. En fin, que no me ha gustado y dudo mucho que vuelva a leer a esta autora. |
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