Hierba

Hay momentos en los que el instinto de sobrevivir se impone a la razón. En esas circunstancias, puede que solo creyendo en la excusa del "amor" puedan permitirse aguantar.

En esa estación de consuelo había una puerta principal y un pasillo. No recibíamos a los soldados. Ellos simplemente entraban cuando querían.

Tenía quince años y en varias ocasiones culpé a mi madre. Si me hubiera dejado ir al colegio…

La tierra despertará de su hibernación y los brotes tiernos se erguirán entre las hojas muertas, marchitas de frío. Son hierbas que resisten al viento y a todo lo que las pisotea. Es la hierba que os saludará con timidez, rozándoos suavemente las piernas.

Nosotras seguiremos luchando, sin rendirnos, hasta que Japón ofrezca una disculpa sincera e indemnice por todo el daño ocasionado.

Cuando las tropas japonesas se retiraron, llegaron las soviéticas. Al igual que las primeras, cometieron barbaries. Apresaban a cualquier mujer que pasase para satisfacer sus deseos carnales. Yo misma presencié como, tras violarlas, las acribillaban o quemaban.

En este caso, quizá amor no sea la palabra más adecuada, pero cuando una ha ido a parar al infierno busca algo que le dé fuerzas para sobrevivir. Un hilo de esperanza. Algo a lo que aferrarse para no enloquecer. Algo que ayude a seguir respirando cuando un día parece una década. Hay momentos en los que el instinto de sobrevivir se impone a la razón. En esas circunstancias, puede que solo creyendo en la excusa del amor puedan permitirse aguantar.

¿No sería que, con la excusa de hacer un cómic sobre la historia de esas mujeres, les estaba haciendo recordar lo que tanto les dolía?

UN HILO DE ESPERANZA. ALGO A LO QUE AFERRARSE PARA NO ENLOQUECER. ALGO QUE AYUDE A SEGUIR RESPIRANDO CUANDO UN DÍA PARECE UNA DÉCADA. HAY MOMENTOS EN LOS QUE EL INSTINTO DE SOBREVIVIR SE IMPONE A LA RAZÓN. EN ESAS CIRCUNSTANCIAS, PUEDE QUE SOLO CREYENDO EN LA EXCUSA DEL «AMOR» PUEDAN PERMITIRSE AGUANTAR.