Las desterradas hijas de Eva

Llegué a este libro a través de un artículo de prensa de El diario.es titulado "Adolescentes encerradas por “inmorales” en los reformatorios ocultos de Franco". En ese artículo, que ya te deja la piel de gallina, se nombra el libro de Consuelo García del Cid Guerra.

Es un libro duro. Durísimo. Con testimonios desgarradores y terribles. No dejas de preguntarte cómo pudo pasar algo así, cómo no hubo nadie que paró aquello, cómo no se sabe su historia.

En 185 páginas conocemos el Preventorio de Guadarrama, el Patronato de Protección a la mujer, el Reformatorio de San Fernando y La Maternidad de la Almudena Peña Grande (reformatorio para menores solteras embarazadas).

Lugares del horror en los que el régimen franquista, de manera sistemática, encerró y maltrató a niñas y adolescentes. Desde 1937 hasta 1984.

Por ser mujeres, por ser pobres, por no ajustarse a la moral impuesta. Cualquier motivo servía para terminar allí: rebeldía, desobediencia, mala estudiante, "manifiesta haber tenido novio aunque sin caer", "aficionada al cine, bailes y al trato con muchachos", "débil mental", embarazada.

Cualquiera podía denunciar: la familia para tapar un embarazo, la iglesia por no ser buena cristiana, los colegios, el vecindario si "ibas con chicos"...

Desprotegidas y olvidadas. Sufrieron maltrato, abusos, palizas, el robo de sus bebés para darles en adopción, prostitución, fueron exhibidas ante hombres que buscaban esposa.

Y de puertas para fuera, silencio.

Es imprescindible y urgente la reparación a estas mujeres: ayuda para encontrar a sus hijas e hijos, que las órdenes religiosas y el estado reconozcan los crímenes, conocer su historia y acoger su dolor, juzgar los hechos. Creerlas.