La balada de nunca jamás

engo que reconocer que al principio la historia me pareció un poco sin más. No sé, creo que es porque Evangeline me parece un personaje muy soso y bastante manido, pero según iba avanzando la trama me fui enganchando más y más hasta no poder parar de leer y devorarlo de un tirón, obviando el hecho de que la protagonista me caía muy mal. Y reseño esto porque, por lo general, cuando el personaje protagonista se me hace insufrible me cuesta mucho leer la historia, pero en este caso no fue así.
En esta novela descubrimos muchas cosas sobre Jacks, sobre LaLa y el Glorioso Norte (que ya solo el nombre me tiene loquísima), pero también sobre cómo funciona el mundo en el que todo tiene lugar.
En esta ocasión el estilo de Stephanie no es tan cargado y pomposo como en los anteriores libros, si bien siguen abundando las descripciones, estas son más escasas y escuetas, lo que me parece bien, y que creo que en esta novela lo que necesitamos es un poco más de acción. Y vamos sobrados.
Hay muchos escenarios, pero todos están perfectamente descritos y diferenciados, puedes imaginarte en ellos en todo momento, aunque eso sí, son todos grises, oscuros y hasta los momentos en los que hay luz esta está cubierta por una bruma de sospecha.
La novela está llena de pasión, de besos no dados y de momentos muy íntimos que resultan necesarios pero no vulgares. Sabéis que a mí no me gustan las novelas con alto contenido erótico y menos si es explícito. En esta ocasión lo que tenemos es mucha, muchísima tensión, de esa que hace que se te ponga un nudo en el estómago, pero creo que está muy bien llevada.

En cuanto a los personajes, Evangeline es insoportablemente tonta. No. Me gusta, no me cae bien, está muy desubicada y a veces me dan ganas de darle dos guantazos, aunque se lo perdono porque el resto de personajes son increíbles. A diferencia de lo que ocurre en otras novelas, en esta ocasión son menos los que aparecen. de nuevo Jacks es muy importante, sigue. Siendo un personaje muy gris, lleno de contradicciones, pero muy bien construido. A veces crees que sabes lo que está pensando y cuando piensas que le has cogido el punto, hay algo que lo cambia todo por completo.
Aquí también se nos abre un poco la historia de LaLa, que me ha encantado. Creo que es un personaje mucho más sencillo que Jacks y, también, mucho más sincero. Tiene algunas cosas que son para odiarla bastante, pero hay algo en ella que hace que la cojas hasta cariño.
Por último tenemos a Caos, un personaje hermético que, sin embargo, tiene su propia historia. E él sí que no puedo contar mucho porque entonces sí que os haría spoilers, así que solo me queda animaros a que descubráis vosotras mismas lo que les pasa.

Conclusión
Este libro, por ahora, es mi favorito de toda la saga, pero necesito saber más, mucho más, y os animo. A meternos de lleno dentro de la historia del Glorioso Norte.
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