La última persona que vio a Silvia Blanch, desaparecida sin dejar rastro el verano de 2017, está muerta. Silvia era joven, guapa y estaba destinada al éxito. Alex, una joven periodista, será la encargada de ir hasta el pueblo de Montseny, donde vivía Silvia y donde se le perdió la pista, para hablar con su familia y escribir un artículo cuando se cumple un año de la desaparición. Una vez allí, empieza a desempolvar todos los detalles de la desaparición en busca de respuestas. Rodeada de secretos y mentiras, no tardará en notar que su presencia molesta a los habitantes del pueblo. Hace unos años había leído Ella lo sabe de la autora, y fue un libro que me encantó y que desde aquí os recomiendo. En esta ocasión la historia me ha mantenido en vilo durante toda la lectura, de hecho tardé dos días en leerlo. No puedo dejar de recomendároslo, sus capítulos cortos hacen que la lectura sea muy ágil y aunque a veces las actitudes de la protagonista yo no las entiendo, ha sido una lectura genial para este verano. |