El pazo de Lourizán

"El pazo de Lourizán" es la primera novela de Lola Fernández Pazos, y está inspirada en la historia de su propia familia.

En ningún momento se aclara si todo lo que en "El pazo de Lourizán" se narra es verídico ciento por ciento, o por el contrario la autora se ha tomado alguna que otra licencia literaria u histórica que le haya podido encajar mejor. Pero lo que si es cierto es que es una historia conmovedora y que, al margen de que sea la historia de su familia, puede ser perfectamente la historia de cualquiera de nuestros antepasados en lo que a muchos aspectos se refiere.

"El pazo de Lourizán" narra la vida de Lúa y de sus antepasados. Una infancia llena de secretos que, a pesar de la juventud de Lúa, le obsesionan, y que no duda en descubrir en cuanto le surge la oportunidad.

De esta manera, iremos conociendo la historia de Nita, la madre de Lúa, de Madrinita, de Xoana y de la familia Carballo, una familia adinerada y poderosa que vivían en el Pazo de Lourizán.

Lola Fernández Pazos ha unido toda la historia en base a ese secreto familiar, que el lector irá descubriendo poco a poco. Reconozco que me ha faltado un poco de chispa en lo referente a ello. La autora lo va desgranando según avanza la historia, llegando a un punto en que es fácil hilar lo ocurrido y por lo tanto ya me pierde algo de la intriga. Se mantiene, por el contrario, por saber el orden de los acontecimiento o cómo Lúa llega a descubrirlo, pero ya más cómo lectura de entretenimiento que como el propio misterio.

La parte que más me ha gustado es cuando la autora detalla el pasado. La vida de Xoana en Marín y por todo lo que tuvo que pasar. Lo primero en lo referente a su situación familiar, teniendo que trabajar muy joven para llevar un jornal a casa, y aun mal vivir. Su historia de amor, se podría decir una de tantas, entre distintas clases sociales. Llama la atención la importancia que a primeros del siglo XX se daba al linaje, a la procedencia y a tener cierto renombre dentro de la sociedad. La influencia familiar también tenía un gran peso, como el lector podrá comprobar, y lo difícil que era "imponerse", por así decirlo, al cabeza de familia.

Pero no sólo en lo referente a gente importante ocurría eso, con los vecinos pobres de Marín o de la aldea donde vivía Xoana pasaba lo mismo. Ciertas acciones también estaban mal vistas, y luego las habladurías, o ser la amante de, tenía repercusiones o provocaba que se le catalogara de algo que no era y por lo tanto no obtuviese ninguna ayuda o trabajo de lo que fuera al solicitarlo.

Es duro leer también todo lo referente a la Guerra Civil, la pobreza y el hambre que dejó a su paso. Incluso familias poderosas como los Carballo se vieron afectadas, y más aún los aldeanos, con situaciones más extremas para sobrevivir.

Me ha llamado también la atención toda la parte descriptiva de el Pazo de Lourizán y sus explendorosos jardines. Me hizo buscar fotos reales y me parece un lugar idílico en el que perderse una tarde de paseo.

Lo cierto es que poco más se puede decir al respecto, ya que lo bonito de "El pazo de Lourizán" es ir descubriendo poco a poco cómo ocurrió todo. Así que tan solo déjate llevar por sus páginas.

Pero lo que no me ha acabado de llenar es la manera de narrar la historia. Lola Fernández Pazos ha dividido en tres partes la trama de la novela. En las dos primeras, la voz narradora es en tercera persona, en la última, la tercera parte, se cambia a primera persona. Esa voz, tipo voz en off por la manera de narrar y de expresar lo que iba ocurriendo en las dos primeras divisiones del libro, me ha mantenido totalmente aislada de la historia. Era como ver una película que alguien a la vez me narra, ya que, incluso en lo referente a la protagonista, se mantiene esa distancia, como si alguien se lo contase también a ella, por ejemplo, con frases tipo "así te diste cuenta" o "Emocionada por descubrir de una forma tan sencilla su secreto, te dirigiste corriendo". Creo que la autora lo ha enfocado de esa manera en lo concerniente a su infancia y al pasado, como tirando de sus recuerdos y de los recuerdos de otras personas que han ido narrando, pero lo cierto es que así es más difícil que el lector se pueda sentir parte de la historia y viva de manera más nítida y personal los acontecimientos y sentimientos que pretenden traspasar el papel. Por el contrario, con la última parte, se ha intentado recuperar esa cercanía de protagonista/lector, pero ya me ha sido imposible sentirme parte de ello.

"El pazo de Lourizán" es una historia de mujeres fuertes que no se dieron por vencidas ni se conformaron, sino que lucharon por sobrevivir y por salir adelante, fuese como fuese. Mujeres que, una vez más, marcaron una diferencia en la historia de su familia.
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