La catedral del mar

La catedral del mar es una obra magna por si misma, es capaz de transportarte a esa Barcelona del siglo XIV y empatizar con los personajes que te ofrecen. Aporta una crítica social bastante fuerte sobre el régimen a los que estaban sometidos en aquella época, lo difícil que era sobrevivir si pertenecías al pueblo llano y con los estamentos tan marcados. Toda esta crítica la recoge con los ojos de Bernat, un campesino que trabaja en las tierras de su familia, Los Estanyol. Un día sucede algo trágico y tiene que empezar su vida desde cero, junto a su hijo Arnau, para poder buscar la libertad en Barcelona. Es algo bastante curioso que la historia transcurra mientras la catedral está en construcción, ya que también nos aporta datos de su construcción, su arquitectura y otras muchas características. No hay que asustarse por su extensión ya que la historia es muy dinámica, avanza muy rápido, está muy bien escrito y no se hace nada pesado. A pesar de mi escueto conocimiento de la sociedad y política española en el momento que transcurre la historia, he de decir que está muy bien documentado. Consigues conocer las personas que estaban al poder, sus intenciones, los intereses económicos, como se trata a la población, para mi es de lo mejor que contiene la obra.
A la hora de escribir los personajes, todos tienen su personalidad y no sobra ninguno en la escritura. Aunque, en mi opinión, se ha sido un poco injusto con ciertos personajes, a la hora de cerrar sus historias o su relevancia en la trama y podrían haber aportado más a la historia. Esa es la única queja que puedo aportar y no es por ningún fallo del autor, sino mi punto de vista subjetivo, igualmente, la historia me ha encantado.
Para finalizar, es una de las mejores obras que he leído, he aprendido y me he llegado a emocionar con ella. Sin duda alguna lo volveré a leer en el futuro y la recomendaré a todo aquel que quiera adentrarse en una nueva historia.