Arrebol

Es una novela escrita en dos tiempos, combinando la historia pasada con la presente. El enfoque pasado permite dar un toque de cordura y aceptación entre comillas a lo que sucede en la actualidad, historia dura donde las haya pero narrada de forma sensible y sin regodeos. Con capítulos cortos, el ritmo de la lectura va incrementándose a medida que te metes en los pensamientos y sentimientos de los personajes, con lo que no puedes parar de leer. Los personajes están muy bien definidos, y con los giros y trama de la historia la autora me ha hecho dudar de todos, en cada capítulo era uno el malo para mí, cosa que desconcierta y anima a continuar para desvelar quién será al final el asesino.
La ambientación es fantástica, he descubierto cosas de Cullera que desconocía y que me han parecido súper interesantes.
El tema de los malos tratos infantiles se me hizo especialmente duro, pero Estela lo describe con habilidad y sin demasiados detalles innecesarios. Me ha parecido interesante dentro de la dureza del tema cómo describe la normalización que hacen los menores de la situación inentendible que sufren, y cómo lo interiorizan de tal forma que lo extienden en su futuro, con las consiguientes consecuencias. Ha plasmado de forma genial es trasfondo psicológico de la situación.
Y bueno, en resumen un libro recomendable al 100% que me ha hecho disfrutar y desear leer más historias de la teniente Sanahuja.