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Este es un libro que me encantó y me sigue teniendo enamorada. Pero hubo algo que me chirrió y no es culpa del libro. Os cuento. Bree se muda con su madre a una cabaña, les hace falta un cambio de aires a ambas y más después de cierta tragedia. Allí se reencuentra con antiguas amistades de su infancia, que le harán revivir recuerdos y a cierto fantasma. Hasta aquí todo bien. El libro ya se ve por su sinopsis que es juvenil y que va a tener drama. La prosa de la escritora hacía que me mantuviese totalmente enganchada. La historia, que transcurre de una manera fluida, hace que te metas totalmente en ella y te impliquen con los personajes. Ahora bien, la historia no es lo que parece. Beatriz ha sabido hilarla muy bien y a la vez tratar un tema bastante serio. Algo que a día de hoy aún es tabú hasta cierto punto y que es bastante desconocido. No digo más por no destripar. Ya digo que no tiene fantasía en absoluto. Y ahora, lo que me chirrió: Mucha gente sabe que me gustan los libros con vueltas de tuerca. Bien, pues debo decir que tengo la manía de mirar reseñas en goodreads para ver si me convence (si tiene instalove lo descarto, si no cierra bien el final,etc.) Para mi sorpresa ESO que yo no quiero desvelar, estaba en muchísimas reseñas. A tomar viento la gran sorpresa. |
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