(…) Siempre había deseado mostrar su habilidad con la espada en una lucha de verdad. Quería demostrar a los hombres de su clan que podía hacer lo mismo o más que cualquier otro hombre. Y aquella era una oportunidad perfecta para ello, pues acababa de tomar el mando del clan y sentía que su deber era demostrar su fortaleza, no su habilidad cosiendo camisas para su marido.
|