Segunda parte y deseando leer más. Es una segunda parte, la continuación de la edad dorada y es una historia con más investigación si cabe que el anterior; a los múltiples casos de asesinatos de las multíparas, se unen varias desapariciones y otros asesinatos en circunstancias extrañas, todo parece tener conexión, pero es muy complicado conseguir pruebas de ello, hay mucho trabajo compartido entre Jack, Óscar, Sophie, Anna y Elise, está última me ha sorprendido mucho con su agudeza, su inteligencia y como se adelanta en muchos momentos a las órdenes o líneas de investigación de los policías. En el tema personal y familiar hay que hacer frente a un par de pérdidas importantes, ya empieza con la muerte de Cap y el regreso de Sophie a Nueva York, la relación entre Jack y Anna va consolidándose normalmente con el día a día, cada vez están más unidos y se completan a la perfección. Las niñas son todo ternura, pasan por momentos muy duros, Rosa tan madura y protectora y Lía tan ágil y afectuosa con todo el mundo. Todos tienen que adaptarse a las leyes y a las nuevas normas impuestas, una historia muy familiar y muy de mujeres, me encanta como se ayudan todas, como se consultan, se apoyan y lo hablan todo, con respeto y cariño. Me he sentido muy implicada en la investigación y he visto como iba deduciendo cosas al mismo tiempo que ellas, también me ha gustado mucho la humanidad y buenos sentimientos que tienen ellas hacia los demás, no juzgan, son compresivas, a pesar de las atrocidades ocurridas, entienden lo que ha motivado todo y como medicas y personas actúan. Tenemos nuevos personajes como Noah Hunter o la tía Amelie que la conocíamos de oídas y todos los anteriores del primer libro y aunque la investigación queda cerrada yo espero que haya por lo menos un tercer libro y saber más de todos ellos y por donde irán sus vidas y sus nuevos proyectos. Los personajes principales siguen siendo las primas Anna y Sophie Savard y la estudiante de medicina Elise Mercier, junto con todos los demás, son mujeres decididas, muy inteligentes y valientes, capaces de enfrentarse a todo tipo de problemas, a los prejuicios por ser mujeres o por ser de color, unas adelantadas a su tiempo, en un mundo de hombres, aunque cada vez son más valoradas y queridas. Sus nuevos proyectos hablan mucho y bien de sus buenos sentimientos y sueños, el cariño por los niños Russo y por hacer lo mejor para ellos. Se nota el gran trabajo de documentación que hay detrás, la ambientación y lo bien que esta todo detallado y descrito con datos y hechos de esos años, es un fiel reflejo de la sociedad neoyorquina de la época. Ha sido muy fácil imaginarlas juntas recorriendo todos esos lugares y en sus trabajos. Una historia que merece mucho la pena, que a pesar de su longitud, se hace corta y te deja con ganas de más, es emotiva por momentos, de superación y seguir adelante con lo que te toca en la vida. Esta familia me tiene entusiasmada y deseando leer todo lo que salga de ella. Lo recomiendo al 100%. |