Edenbrooke

¿Conocéis esa sensación de empezar a leer un libro y no encontrar un momento en la trama adecuado para parar? Pues eso es lo que me ha ocurrido a mí con Edenbrooke, pero es que además no quería parar de leer. Es una historia que te atrapa desde el principio.
Nuestra heroína, Marianne Daventry, tras la muerte de su madre se muda a Bath con su abuela, pero siente que se encuentra prisionera en la ciudad, por lo que cuando su hermana gemela la invita a pasar unas semanas en una casa de campo, no se lo piensa dos veces. Ama el campo y la libertad que le da vivir lejos de las imposiciones de la época para las jovencitas como ella.
Pero todo sale mal desde el principio, aunque el resultado de todo ello no sea tan malo al final. Marianne conocerá a la familia que les ha invitado a pasar un tiempo en su casa, y a pesar de la primera impresión que se lleva de uno de los hijos, enseguida se hacen amigos.
Es una historia llena de intrigas, de amor y de momento divertidos y disparatados.
Me encanta como la autora ha creado a estos personajes. Tanto Marianne como Philip se hacen buenos amigos desde el principio. La forma que tiene Philip de permitir a Marianne disfrutar de actividades que son puramente masculinas, y cómo la trata y no entiendo cómo ella puede estar tan ciega!!!
He leído el libro en un día...y me encantaría saber más de esta pareja tan adorable.