Cuento de Navidad

La historia del avaro señor Scrooge que recibe la visita de tres espíritus en la víspera de Navidad es ampliamente conocida, así que me dispuse a leer este clásico de Dickens sin demasiadas expectativas de sorprenderme. Sin embargo, tanto la narración como los comentarios de Scrooge me llevaban por un torrente de emociones tal que, todavía no me lo explico, he terminado la lectura con lágrimas en los ojos... Qué bonita es la historia de redención, cuánto bien somos capaces de hacer en el mundo si nos lo proponemos y qué importante es que no se olvide el espíritu navideño, seamos grandes o pequeños.

Siempre me pasa algo curioso con Dickens y es que lo "escucho" (sin ser audiolibro, quiero decir). No sé si por la forma de narrar que apela tanto al lector, si por las descripciones minuciosas que abandona y retoma como quiere, o si por los diálogos tan bien conseguidos con las expresiones cuidadosamente escogidas para cada personaje, pero lo cierto es que leer un libro de Dickens siempre me anima a leerlo en voz alta, a notar el énfasis que le da a cada frase que lo requiere y a dejarme llevar por los rodeos que da tantas otras veces.

Se merece el puesto como clásico navideño por excelencia.