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La gitanilla se llamaba Preciosa, era una bella mujer de ojos verdes, de cabello rubio y con muy buenos modales. En el inicio de esta historia y de camino a Madrid un hombre noble se acercó a ella, asegurando estar enamorado. Pero ella sabía que era lo que quería, un hombre que la quisiera de verdad, que la desposara. Un hombre que se mostrase como era, que respetara su virginidad y que hiciera parte de los gitanos por dos años, para hacerlo así uno de ellos. Al notar que él no le ponía atención porque solo tenía ojos para Preciosa, ella le tendió una trampa. El hombre terminó con joyas de Carducha en su bolsa, así que ella lo acusa de haberlas robado y así lo arrestan. En estas aparecen los padres biológicos de Preciosa, que al instante la relacionan con el bebé que les robaron. Ella había robado a Preciosa cuando era tan solo un bebé, es decir, que ella era de una familia acomodada y no lo sabía. |
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