Romperás la noche con un grito

¡Hola lectores!
Hoy les traigo una novela de infarto. Un thriller brutal, que he disfrutado mucho. Grandes dosis de angustia, tensión y horror encontrarás entre sus páginas.

La trama se desarrolla en Valencia, es maravilloso como el autor nos transporta a sus calles y hasta su subsuelo. Y comienza de la manera más angustiante. Imagina que despiertas y descubres que tu hijo, un bebé de siete mes, lo que más amas en el mundo, no está en su cuna, alguien lo ha secuestrado. Esto es lo que le toca vivir a Ignacio, un médico que es padre soltero.
El autor refleja perfectamente esa angustia y desconcierto, que sienten tanto Ignacio, como la inspectora Bru y el teniente Israel, encargados del caso.
Equipos de policía nacional y guardia civil, tendrán que trabajar codo a codo, dejando de lado sus diferencias o conflictos personales, para enfrentar una trama de lo más oscura.

Me ha encantado como el autor presenta a todos los personajes, con gran profundidad. Como nos muestra pinceladas de su pasado, de su niñez, lo que permite comprenderlos y empatizar con ellos.

La narración es fluida y con numerosos giros y momentos de tensión máxima, que hacen que no puedas soltar la novela. Son numerosos los personajes que aparecen y hay que estar atentos para no perderse ningún dato, pues veremos como todo tiene su importancia, pues David Orange no deja puntada sin hilo.

La primera parte se centra en el secuestro del bebé, pero a mitad de novela se produce un giro que cambia completamente todo. En lo que veremos que nada es lo que parece y que hace que dudemos de todo y de todos.
Una historia brillante, adictiva, un thriller magnífico, que muestra los traumas y miedos más profundos del ser humano y de cómo la infancia marca nuestra personalidad.
Sin duda, una novela que recomido a todos los amantes del buen thriller.