Un Cowboy para Nochebuena

Layla llega al rancho Davis para pasar un mes y las Navidades en compañía, su madre ha muerto hace poco y era su única familia.
Desde el principio todos la aceptan como un miembro más de la familia, su dulzura y su forma de ser despierta la ternura en todos los miembros de la familia. En todos menos en Chase, el hijo mayor de los Davis (hermano de Tyler del primer libro), que está enfadado con el mundo desde hace un año y comienza a pagar su frustración con las mujeres con la pobre Layla, que no entiende porque la odia tanto.
Un gran susto hará a Chase cambiar su actitud hacia ella y tomar en perspectiva su comportamiento con ella y sus sentimientos reales hacia ella.
Pero las cosas no serán sencillas, el dolor de las acciones del pasado por un lado y el dolor a las acciones presentes por el otro hacen que esta pareja esté desnivelada en términos sentimentales.

La novela es rápida y entretenida, bastante más larga que las anteriores, con un poquito más de escenas de transición en las que conoceremos mejor al resto de hermanos Davis, también tiene algunos momentos sentimentales en bucle pero como están intercalados con conversaciones con los hermanos, vida cotidiana, momentos rápidos y capítulos cortos, se hacen muy llevaderos.
La novela es bonita y entretenida, con una resolución del problema divertida, que deja buen sabor de boca y ganas de más, sobre todo de más de otros hermanos Davis, como pueden ser Kylie y Dominique.