Soñé en La Habana

Me ha parecido un libro distinto en el que, de la mano de Alicia, su protagonista, te adentras en un país como Cuba, en sus tradiciones, en sus costumbres y, sobre todo, en la peculiar manera de vivir sus habitantes. Alicia es una mujer madura y atractiva, divorciada, con una hija adolescente, con un trabajo de editora, que planea un viaje a Cuba con su hija. Ambas apenas disfrutan los días que están hospedadas en Cuba hasta que el último día Alicia sale sola y conoce a un chico cubano. Ahí me quedo ya que no me gusta nada que en una reseña me destripen un libro queriendo ser yo la que me adentre en la historia sin que nadie me la cuente de antemano. Sólo decir que he disfrutado y he sufrido un poquito con Alicia aunque debo de reconocer que Alicia podríamos ser cualquiera de nosotros y, en un estado de enamoramiento, estaríamos dispuestos a cegarnos y a hacer cualquier tipo de locura por amor. Yo lo llamo locura, otros lectores podrán decir que no lo es. Y esto es lo bonito de este libro en el que, acompañando a Alicia, cada uno tendrá libertad para opinar sobre sus decisiones, si fueron o no acertadas y, en definitiva, si hubieran actuado como ella estando en su situación.

Es un libro que se lee con gusto y que te adentra en la vida y en las aspiraciones de la gente cubana tan distinta a la de nosotros. En muy poco tiempo he leído este libro ya que te incita a seguir sus páginas y descubrir qué va a pasar con su protagonista. Y en estos días complicados de estar en casa recomiendo este libro como un buen compañero ya que, a través de él se nos permite salir y viajar con nuestra imaginación a Cuba y a la vida de Alicia.