Fairy Quest 2. Desterrados

Sinceramente, ha sido una lectura tan buena y gustosa en lo visual, como sencilla y corta, y realmente no hay mucho que decir respecto al anterior álbum.

No obstante, no lo digo de forma despectiva ni mucho menos, porque aquí tenemos la continuación de lo narrado en el anterior, con unos Caperucita y Lobo Feroz que intentan escapar a toda costa del yugo del malvado señor Grimm, viviendo con ello una maravillosa pero peligrosa aventura por este mundo de fábulas, encontrándonos a un personaje clásico tras otro, que por sus curiosas caracterizaciones en esta historia resultan muy interesantes y divertidos (aún más con las nuevas versiones de sus famosas historias que nos cuentan), como en el caso de Rapunzel o de un curioso trol.

Pero lo más interesante es el personaje del señor Andersen, otro escritor de cuentos clásicos integrado en la trama y que cumple el papel contrario al de Grimm, y que nos ha dado unas cuantas píldoras de interesante información sobre lo que existe más allá del mundo de los sueños.

El final lo deja todo en un punto de lo más interesante, con nuestros protagonistas llegando a lo que parece el país de Oz. ¿Conseguirán salir ilesos del encuentro con sus habitantes? ¿Es toda esta historia real o simplemente el cuento de una madre a su hijo? Todas esas y muchas respuestas más esperarán en las siguientes entregas, las cuales me muero por leer, no sólo por el encanto que esta serie desprende, sino por el pedazo de dibujo y color que se gasta la obra, de la mano de Ramos y Olea, en lo que seguramente es el mejor trabajo jamás hecho por ambos, y uno para el que parecen haber nacido.

Espero que pronto salga en España la tercera entrega para poder disfrutarla y reseñarla sin falta.