La historia es cute y triste. Al principio de verdad creí que lloraría porque la historia entre los protagonistas me parecía tan bonita que simplemente quería protegerlos. Y cuando sospeche de un posible terrible final, no quería llegar hasta esa parte porque sabía cómo acabaría y estaría simplemente en lágrimas. Desafortunadamente perdí un poco de ritmo porque la autora trató de llevarnos hasta dicho final, de manera lenta, para que la premisa inicial "mil besos" pudiera concluirse. Así cuando llegue a ese final ya no pude sentirlo ni disfrutarlo como hubiera querido. Además, hubiera preferido que la muerte de Rune se narrará en tercera persona para que fuera más sensible y acabará realista. Así solo fue un final "feliz". Si un libro me va a destruir, quiero que lo haga bien. |