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Leí este libro hace tres días. Aún no deja de doler. Si te gustan los libros sufridos y que dejan el corazón destrozado, este es perfecto. Fue tan hermoso como destructivo. Poppy y Rune se conocieron desde pequeños, cuando Rune se mudo a la casa de al lado de Poppy. Tenían ocho años cuando entendieron que eran ellos contra el mundo, eran niños; nadie los puede culpar por creer eso. Y luego, cuando supieron que se amaban, cuando Rune no podía dejar de ver a Poppy, cuando no pensaba en nadie más que en ella, todo comenzó a desmoronarse. Kilómetros de distancia separaron lo que habían construido, pero algo mucho peor que eso terminó con sus besos. Lloré con este libro, muchísimo, pero no me arrepiento de haberlo leído. La vida de estos personajes se basa en una aventura, ve con ellos. Pero, debes saber, que hay aventuras de las que no se vuelve. |
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