Esta es la reacción al exilio. Cuando una mujer recurre a una conducta compulsiva y repetida -repitiendo una y otra vez un comportamiento que no la satisface y que provoca declive en lugar de una prolongada vitalidad- para aliviar su exilio, lo que hace en realidad es causarse más daño, pues no se cura la herida inicial y, en cada una de sus incursiones, se produce nuevas heridas.
|