Nuevamente, Chimamanda nos ilustra con una brevísima obra escrita a modo de carta (Porque realmente lo escribió pensando en una amiga suya y cómo educar a su hija). Se centra nuevamente en el machismo, pero sobretodo en la educación que debemos darle a nuestros hijos e hijas, no dejando que unos se sientan por encima de los otros, que crezcan con privilegios, que se menosprecien, que fomenten la cultura en la que hemos crecido y que tanto daño nos está haciendo. Son sabias y breves lecciones que se leen en un suspiro, apenas minutos, pero que dejarán un intenso poso en todos nosotros y las ganas de cultivar un futuro mejor donde puedan crecer las futuras generaciones. Chimamanda siempre es una elección acertada. |