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María vive sumida en la depresión. Atrapada por un matrimonio que no va bien y una vida que no la llena, decide buscar ayuda en una psicoanalista, Rocío, que de manera inmediata se siente un magnetismo muy especial hacia María, fraguandose entre ellas una relación muy especial. Un accidente lleva a María a un estado de coma del que no se sabe cuándo despertará y que un atractivo inspector de policía se encargará de investigar, buscando la información que necesite a través de Rocío. Y luego están los sueños de María...esos sueños tan vívidos que parecen reales, en los que ella, sin ser ella, lo es, habitando lugares que sin ser su hogar, reconoce e identifica y al lado de un hombre que, sin ser su marido, siente como si conocieras de siempre, viéndose atrapada bajo su influjo en una relación pasional que la dominará y someterá. Dejo sin contar mucho más de lo que digo para permitiros bucear en el particular universo de María sin brújula ni guia, viajando con ella por mundos paralelos y conociendo y reconociendo a aquellos que los habitan y la compleja red que los mantiene unidos. Con una magnífica pluma y jugando mucho con los saltos temporales entre mundos, la autora nos regala una novela muy dinámica que mantendrá nuestra curiosidad despierta desde la primera hasta la última página y que da paso a una segunda parte que querriamos poder leer ya. Una novela muy particular acerca del atractivo tema de los universos paralelos, los agujeros de gusano y la teoría de cuerdas que atrapa desde la primera página. Muy recomendable para aquellos que se encuentren con ganas de una historia diferente que les haga pensar. |
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