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En primer lugar, me encanta el amor que Anna siente por Jane, se nota perfectamente en todo el libro, un homenaje a Persuasión. Si habéis leído el libro de Jane, notaréis que la historia es casi igual pero en la actualidad. La protagonista se llama Anne Elliot, como la de Persuasión, tiene unas hermanas que ni existen y un padre de lo más antiguo. Luego está Manel, un chico de Barcelona que fue de Erasmus a Londres donde conoció a Anne y el amor por Jane y toda su historia. Por ciertos motivos, se separaron. Después de varios años, Anne es camarera y Manel ha creado una app. Aparte del amor que sienten el uno por el otro, los une la historia de Jane y Tom Lefroy. Cuando Manel vuelve a Londres, se encuentra con Anne, al principio todo es muy frío y distante pero poco a poco empieza a surgir el amor (no olvidado) que sentían el uno por el otro. Va todo a su ritmo, sin ser forzado. La autora va viajando desde el pasado hasta el presente, algo que me ha gustado pero me aburrió tantas descripciones y detalles. Un "retelling" de Persuasión que no ha estado nada mal pero que no me ha llegado a encantar. Eso sí, Londres me ha encantado demasiado. |
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