El susurrador

El susurrador o Lobos, como también se la conoce, es la primera entrega de la trilogía protagonizada por la investigadora Mila Vásquez y con la que Carrisi debutó en el panorama literario haciéndose valedora de varios premios, entre ellos el Premio Bancarella.

La trama comienza cuando unos niños que están paseando a su perro descubren, alertados por el animal, una pequeña fosa en la que hay un brazo. Cuando llega la policía descubren que hay cinco brazos más y que pueden pertenecer a unas niñas desaparecidas pero el sexto brazo ¿de quién es?

El equipo que se encarga de la investigación está capitaneado por el criminólogo Goran Gavila y se solicita la colaboración de Mila Vásquez porque nadie ha denunciado la desaparición de ninguna menor y ella es la mejor resolviendo casos de menores desaparecidos o secuestrados pero, en esta ocasión, parece que el culpable va unos pasos por delante de ellos y todo se irá complicando a medida que pasamos las páginas ya que serán varios los culpables y varios los crímenes que se suceden aunque todos tienen algo en común.

Si os gustan los thrillers que te atrapan desde el principio y no puedes soltar hasta que lo terminas El susurrador hará tus delicias y no sólo porque que tiene un argumento que engancha desde las primeras páginas, también por los personajes que crea Carrisi –tanto los buenos como los malos tienen sus luces y sus sombras-, la forma con la que juega con el lector y, sobre todo, porque es un genio con los giros argumentales.

Carrisi se especializó en criminología y ciencias de la conducta y eso se nota en El susurrador ya que, a través del personaje de Gavila nos dará unas clases magistrales de criminología. Quizá a algunos lectores estás partes se les puedan hacer un poco pesadas aunque, en mi caso, las he disfrutado mucho y pienso que enriquece la historia en sí misma.

Una cosa que me ha llamado la atención es que no sitúa la historia en ningún lugar concreto, no da nombres de ninguna localización y las descripciones pueden corresponder a cualquier ciudad. También me ha llamado la atención el final, que no he visto venir en ningún momento, porque plantea la hipótesis de si a través del mal se puede hacer el bien.

Como decía antes, El susurrador es la primera entrega de una trilogía y pese a que tiene un final cerrado sí deja la puerta abierta a una segunda parte en cuanto a los personajes se refiere.

Una novela que hará las delicias de los amantes de un buen thriller donde nada es lo que parece y, como si de una muñeca rusa se tratara, se irán resolviendo los casos uno a uno hasta llegar a un final que te deja con los ojos como platos.
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