Don Lamb es un profesor de historia del arte en la facultad de Peterhouse de Cambridge. Es muy académico, serio, y está obsesionado con el color de los cielos que pintó Tiepolo, pintor renacentista italiano, tema sobre el que está escribiendo un libro. A raíz de un incidente con una escultura contemporánea del campus, se ve obligado a dimitir y dirigirá un museo en Londres. Allí conocerá a Ben, un joven artista, que le hará descubrir otro mundo, totalmente opuesto al que ha conocido siempre, y empezará a frecuentar la noche londinense. Tenía muchas ganas de estrenarme con la editorial ya que cada libro que publica me llama la atención, y finalmente me decanté por este. Los libros de campus me gustan mucho, y creo que aún no había leído ninguno ambientado en Cambridge. Además, el arte siempre es interesante y la sinopsis prometía oscuros secretos. A pesar de ser una lectura muy ágil y con una primera parte que me ha gustado mucho (toda la parte del campus), he de reconocer que la segunda parte no me ha enganchado tanto. El protagonista no me ha caído bien, aunque es comprensible, ya que el autor nos muestra la evolución de su crisis hasta su inevitable caída. En este sentido, creo que está bastante conseguido y a lo largo de toda la novela acompañamos a Don hacia ese desenlace que (en mi opinión) es el único posible. El ritmo de la novela es lento, os gustará si disfrutáis de extensas descripciones, pero el final es bastante trepidante. Por mi parte me quedo con las discusiones sobre arte y el descubrimiento de Giambattista Tiepolo. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. + Leer más |