No sabía si leería terror, fantasía thriller... lo que no esperaba es encontrarme con un libro adictivo que lo tiene todo y que te sorprende a cada capítulo. Tenemos una niña desaparecida en un internado y la única pista es un diente arrancado y sangre. Lukas lucha contra sus propios demonios y será uno de los encargados en resolver esta desaparición junto con el veterano Ritter, que parece tomarse la justicia por su mano. Muchas mujeres desaparecidas, muchas muertas y un rastro de sangre. Repito, wow. Sin palabras. Un libro que te engancha, lleno de giros sorprendentes y escenas macabras que harán gozar a los amantes de la sangre. Personajes llenos de monstruos y ángeles que son diablos. En este libro no hay un límite entre la bondad y la maldad, todo está mezclado y así de crea este thriller fantástico y sorprendente. Me han perturbado los personajes y sus sombras, era como ver a gente con varias personalidades y no sabes de quien fiarte. Me declaro fan de este autor y el final no me lo esperaba, mi cara al ocurrir ha sido un poema. Muy muy recomendado. |