Gran obra y gran reflexión existencialista. Espectacular el duelo dialéctico entre el reverendo y el médico, entre la fe y la razón, en una situación desbordante por el sufrimiento y dolor causados por la enfermedad. Muy bien descrita la ciudad de Orán, metrópoli colonial europea del XX en la costa argelina, que parece un personaje más de la obra. Interesante para aquellos que gusten de la filosofía y la medicina. Un final tremendamente triste. |