Es de esos libros que cuando salió no me llamaba especialmente la atención y que me he animado a leer por las buenas críticas y reseñas que he ido leyendo y… Me ha gustado más de lo que esperaba. Ambientado en la sierra Tramontana (Mallorca), con pequeñas pinceladas de su dialecto y de sus costumbres, narra la historia de dos hermanas que fueron separadas pero que gracias a una extraña herencia se reencuentran de nuevo. La novela comienza por el final y te va desarrollando a lo largo de los capítulos cómo se llega a ese inicio. La sororidad es el hilo conductor de la trama, una novela de relaciones familiares y de secretos, en donde las protagonistas Anna y Marina lograron conmoverme por diferentes motivos. El ritmo de lectura fluye fácilmente, con una prosa ágil, llena de ritmo y de sentimientos, una historia que ha logrado sacarme alguna sonrisa pero que, sobre todo, me ha emocionado. |