Después de haber leído La parábola del sembrador y la parábola de los talentos encontré por casualidad Parentesco, y la verdad es que me ha gustado incluso más que los otros dos libros mencionados. Una historia entretenida, con tintes históricos y, como es habitual en este escritora, todo en torno al racismo y a lo que conlleva ser una persona de color. Lo recomiendo enormemente. |