Para Ser Escritor

Cada escritor debe encontrar la mayor parte de su material dentro de sí mismo. Eres única, nadie vivió exactamente la mismas experiencias que tú, ni llegó a las mismas conclusiones, ni encara el mundo con exactamente el mismo conjunto de ideas que debes de tener tú. Si eres capaz de tener tan buena relación contigo mismo que estás dispuesto a decir con precisión lo que opinas de una determinada situación o de un determinado personaje, si puedes contar una historia tal y como te parece a ti, de entre todas las personas que hay sobre el planeta, entonces, inevitablemente, tendrás una obra que es original.

La mayoría de los escritores en ciernes son ratones de biblioteca, y muchos de ellos son fanáticos de los libros y las librerías. Pero a menudo hay un profundo rechazo a la idea de diseccionar un libro, o de leerlo solo por su estilo, o solo por su estructura, o para ver cómo el autor se ha enfrentado a sus problemas. Cuando hayas aprendido a leer críticamente descubrirás que tu placer es mucho más profundo de lo que era cuando leías como amateur; hasta un libro malo se vuelve tolerable cuando te dedicas a analizarlo para descubrir las razones por las que sus efectos resultan artificiosos y torpes.

Un escritor debe ser un excelente lector de sí mismo.