Este “ gringo viejo” más sabe por viejo que por Bierce, y tal vez haya aprendido mucho de ello en su “ Diccionario del Diablo”, o escucho en “ las historias de soldados”lo que aquí relata sobre las casas encantadas, Aunque el realmente encantado soy yo de haber leído estas descripciones sin solución acerca de los embrujos que atañen a los citados hogares, las extrañas desapariciones, individuales o en grupo, las espeluznantes noches que ofrecen en su interior a los valientes que deciden investigar la razón de los fenómenos antinaturales de las mismas. El hilo de la temática es el mismo . Casa vacía habitantes desaparecidos, fenómenos lumínicos y auditivos, puertas que abren y cierran solas ,pasos en el interior y ausencia de huellas de lo sucedido. Exceptuando “ la parra” y el último relato “ que fue lo qué pasó en Nolan” en los demás no hay datos para solucionar o entender, basta con un casi “ así es la vida” …o la muerte. Vamos que incluso el autor desapareció, después de cruzar el “ puente de Owl Creek” se dirigió al estado mexicano de Chihuahua y se dce que no se le volvió a ver. Aunque Carlos Fuentes le rinde un homenaje en la ya citada “Gringo Viejo” de casas encantadas y lectores hechizados,por la escritura de Bierce , de eso trata esta reseña. gracias a @BeaLibra que con su reseña me introdujo en estas “ casas encantadas” y curiosamente, en el encantador mundo de las “Fábulas de Robots” de Stanislaw Lem. . Una relación sin razón,… o digamos que he perdido la razón Cualquiera con tantos fenómenos paranormales |