Este libro es una invitación a revivir historias ya contadas y a imaginar a sus personajes entre bambalinas. También a pensar en el pasado, en lo que ha cambiado y en lo que no. En este caso, las historias son las obras de teatro de Federico Garcia Lorca, repletas de protagonistas femeninas enfrentadas a todo tipo de injusticias y destinos marcados y sellados con alambres de espino. Todas ellas encarnaban la represión de la mujer en la época de Federico y sus historias estaban muchas de ellas basadas en familiares del propio autor o de noticias que leía en el periódico porque, desgraciadamente, la realidad superaba en crudeza a la ficción. En este libro de edición impecable que se lee a sorbitos como un cuento con muchos personajes, estas mujeres vuelven a la vida y coinciden todas ellas para compartir sus historias y reescribirlas. El resultado: un homenaje precioso a Federico y a sus maravillosas obras de teatro. La edificación y las ilustraciones son una auntentica maravilla. En algunos momentos la historia puede resultar demasiado triste y estática pero se destila tanto amor por las obras que el resultado, para quien las admire, es muy bonito. Eso si, no recomiendo su lectura a quien no haya visto o leído todas las obras teatrales de este autor porque se entra mucho en el detalle de ellas. |