En una sociedad sin animales por un virus letal que ha obligado a matarlos se inicia un canibalismo industrial, se crían humanos para su consumo. Se altera el lenguaje para llamarlos cabezas, y otros términos que ocultan la realidad: la gente se come a otra gente. Aparte de esta original trama no hay nada más, el libro es seco y lento, no engancha, no hay argumento más allá de lo ya señalado. Se destila una cierta crítica, quizá a ser carnívoros, quizá a que el hombre es un lobo para el hombre. No es una lectura que entretenga ni que atraiga.
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