Peter Pan (Edición Ilustrada)

¿Cómo voy a criticar el cuento de J. M. Barrie si fue el creador y el impulsor de todo lo que vino después?

Con esta reflexión empiezo la reseña:

Como todas las versiones originales de las historias infantiles, Peter Pan es más cruel y siniestro de lo que parece. Se habla de matar (y de la muerte) con una facilidad y una simpleza que asusta; se describe a según qué personajes de manera vejatoria, llegando a incomodar; el narrador, que es el propio autor, se pasa todo el libro lanzando pullas.

Como ya digo, es J. M. Barrie la voz en off que cuenta la historia, haciendo cómplice al lector y viajando con él de un lado a otro para "espiar" a los personajes.

Algo que no conocía y me ha parecido muy curioso (que no quiere decir que me guste) es el hecho de que todos los niños conocen el país de Nunca Jamás y a Peter Pan sin haber estado allí, solo a través de sus sueños y su imaginación. A mi parecer, esto le resta magia al momento en que Peter conoce a Wendy y la lleva de verdad a Nunca Jamás.

Peter Pan es, por un lado, el niño infantil, egoísta y egocéntrico que todos conocemos, aunque al parecer en las adaptaciones suavizaron bastante estos rasgos. Pero, por otra parte, tiene algo muy diferente que no me ha gustado nada: la memoria. Sufre grandísimas pérdidas de memoria, desde cosas insignificantes a temas tan importantes como si ha matado a un pirata o no, llegando a olvidarse de la gente para recordarla mucho tiempo después, como si no hubiera pasado nada.

Me ha sorprendido mucho la profundidad del personaje de Garfio. Tiene un carácter y una personalidad que definen todos sus actos y se rige siempre por ellos. Bueno, casi siempre. Ahí está su conflicto interior. En una versión más larga de este cuento me hubiera gustado ahondar más en él. Cuando vuelva a ver las películas me fijaré especialmente en esto, a ver si lo han mantenido y a mí se me había pasado por alto.

Una enorme queja que tengo de la que realmente no me puedo quejar es la simpleza del momento "yo creo en las hadas" de todas y cada una de las adaptaciones del clásico. Resulta que en la versión original apenas le dedican unas pocas líneas. ¡Qué mal!

El final me ha parecido tan triste y tan poco a la altura que prefiero olvidarlo.

Yo amo la historia del niño que no crece, de Nunca Jamás y de los niños perdidos. Siempre me ha gustado muchísimo. Por eso, saber ahora por fin cuál fue el origen del cuento es tan decepcionante. No puedo obviar el libro, más que nada porque no me parecería justo ni respetuoso con el autor. Pero de ahora en adelante cuando hable de Peter Pan me estaré refiriendo a todo lo que conocía antes.