La verdad es que en el libro se plasma el estilo de Elia. Se desarrolla con calma, con muchas descripciones... Que consiguen que te sientas en el lugar y también todas las sensaciones que describe. La historia me ha encantado. Cuando hay niños de por medio siempre suele ser más duro, pero ella goza de esa delicadeza a la hora de escribir que consigue que te sientas cómoda leyendo. Una historia llena de sentimientos, miedos, frustraciones y en busca de una respuesta que pueda dar esa paz que busca la protagonista. Sigue manteniendo ese misterio de no ser capaz de atar cabos hasta prácticamente el final del libro, por lo que consigue que lo disfrutes aún más. Un final inesperado pero perfecto 😊. Maravillosa Elia y un gran libro que recomiendo muchísimo
|