República luminosa

En un pequeño y tranquilo pueblo cerca de la selva tropical aparecen 32 niños de la nada. Nadie sabe quiénes son ni de dónde vienen y lo que en principio solo produce curiosidad y cierto recelo rápidamente se transforma en terror. Esos niños "salvajes" no son lo que parecían y alteran totalmente la vida del pueblo, invadiéndolo, cometiendo actos muy violentos y llegando incluso a trastornar a los otros niños, los hijos de los habitantes, que se ven irremediablemente atraídos hacia ellos.

La premisa me ha parecido súper interesante porque a raíz de ella, y con un narrador que va recordando y analizando los hechos años después de que sucedieran, el autor nos muestra otra cara de la infancia, desmitificándola, quitándole ese halo de inocencia y nostalgia que solemos tener hacia ella y reflexionando sobre estructuras sociales, el miedo ante lo desconocido, el instinto de protección hacia lo que es nuestro y cómo esto afecta a nuestra manera de reaccionar y comportarnos.

La narración te tiene todo el rato en tensión, es incómoda y cruel. A mí me ha recordado un poco a la idea que nos presenta "El señor de las moscas" (que es un librazo, por si no lo habéis leído) pero con un toque onírico, no sabría si decir de realismo mágico, que la hace muy especial. Ya había leído antes otro libro del autor, "Las manos pequeñas", que también aborda el tema de la infancia desde una perspectiva nada convencional y muy bien llevada que también me gustó bastante. Una lectura diferente y muy interesante que recomiendo.