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En este libro de Lauren Aher vamos a conocer a Rowan, cuyo abuelo le ha dejado una carta al morir con un propósito que debe cumplir si quiere obtener su parte de la herencia. Se establece en Dreamland para cumplir con su cometido, pero nada sale cómo había planeado desde el momento en el que Zahra y su atrevimiento se cruzan en su camino. A lo largo de sus páginas vamos a descubrir las historias individuales de nuestros protas y a su vez seremos testigos de cómo Zahra saca la parte más humana de Rowan, lo importante que son los actos sobre las palabras, cómo debaten con ellos mismos las posibilidades de arriesgarse a entrar en el peligroso juego de los sentimientos y las consecuencias que pueden tener las mentiras en nuestras vidas. Y todo esto con el parque de atracciones Dreamland como telón de fondo. Sinceramente, ha sido maravilloso y el libro más adictivo que he leído en muchos meses. Ha sido imposible dejar de leer en cuanto lo he empezado. Los personajes son increíbles. Por un lado tenemos a Rowan, que es serio, borde, un tiburón en los negocios y tiene una coraza de gilipollas para ocultar que en realidad es un cacho de pan. Y por otro tenemos a Zahra, que es todo lo contrario: divertida, atrevida, torpe, dicharachera… La única persona capaz de ponerle los puntos sobre las íes a Rowan y no achantarse en ningún momento. Son polos opuestos, pero eso hace que se complementen a la perfección y formen un equipo precioso. Y no me quiero olvidar de Declan, Cal, Claire y Ani (en especial de esa última, que me ha parecido maravillosa). La pluma de Lauren Asher me enamoró el año pasado con Throttled y lo ha vuelto a hacer este año con La letra pequeña. Es ligera, fresca y con la mezcla perfecta de diálogo y descripciones (que para mí es imprescindible). Estoy deseando que salgan los siguientes. En resumen, “La letra pequeña” es un libro en el que nos meteremos de lleno en el parque de atracciones de Dreamland y en el que seremos testigos de una historia bonita y adictiva, y donde conoceremos personajes que no seremos capaces de olvidar. ¡Os lo recomiendo un montón! |
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