 |
La guerra, bendita guerra, que ha inspirado tantas historias. Este libro es esa historia de amor que atraviesa el mundo, un mundo que siempre tiene una guerra que vivir y contar. Acá vamos, con un médico, si un médico que hace que la lectura sea mucho más hermosa para mí por esa personalidad aguerrida que vi en Víctor y que me recuerda en cada capítulo a mi pareja. Es una familia que se separa huyendo del régimen franquicia de España, pero que llega a vivir la transición de la democracia en Chile hasta llegar a la dictadura de Pinochet, como decía yo huyen de un lodazal para meterse en otro Es un amor que al principio solo se dio por una mera decisión de supervivencia, pero que termina con una amor bonito. Sufrí con el libro, sentí el frío de los pirineos paso obligado para los que escapaban de España buscando un mejor lugar para vivir, sentí el dolor de los prisioneros de guerra en el estadio nacional de Chile, pero también viví la esperanza de que todo sea mejor en medio de la huida a Venezuela. Recorrí con Víctor y Rose ese amor raro y bonito que al final fue el bálsamo para los años de vejez. También me dió rabia por esa forma en que en ocasiones la iglesia católica hace cosas no santas para salvaguardar un apellido. Al final es un libro demasiado lindo y que me deja con una sonrisa en la cara y me devuelve al amor del que tanto digo nos salvará. |
>
