“Si alguien lee para ti, desea tu placer; es un acto de amor y un armisticio en medio de los combates de la vida” ~ El infinito en un junco de Iréne Vallejo. Hacer un resumen de este libro me resulta harto imposible por el mismo motivo que es complicado trasladar todo aquello que hace sentir a una persona amante de los libros y del arte en general. Irene Vallejo nos lleva de viaje por el mundo de los libros y lo hace desde Grecia a Roma, pasando por Egipto, pero sin limitarse a hacer un recorrido histórico sino que también hay pinceladas de otras épocas, de su propia vida y de su experiencia. Solo os digo una cosa: este libro es una inversión, de tiempo y de dinero; es un compendio de amor a la literatura, la cultura y a la vida. Queda claro y patente que sin los libros perdemos nuestra historia; que los libros nos ayudan en nuestra vida; a afrontar nuestros sentimientos y padecimientos; que los libros nos hacen más humanos, empáticos y universales. Podéis pensar: “Literatura, Historia, ¡qué castaña!” Pero no, nada más lejos de la realidad. No puedo más que animaros a leerlo. Os prometo que no os vais a aburrir porque está muy bien hilado y narrado; lleno de curiosidades, de anécdotas y de momentos mágicos. Eso sí, os recomiendo que no lo leáis de un tirón, poco a poco y descubriréis que ya en la época de Roma se daban circunstancias similares a la actualidad con relación a los libros. Solo le he encontrado un defecto: yo y el TOC que me genera pensar en marcar o subrayarlo porque me hubiese gustado poder hacerlo. Y quizá en una segunda lectura me anime a ponerle post-it, que no dejen pegote, claro, que me da un parrús así que si tenéis confirmada alguna marca que no deje pegamento ya podéis informarme. Gracias. |