Este libro es la segunda parte de Guía del autoestopista galáctico y comienza justo donde se había quedado el primer libro, en esta nueva aventura, las cosas se embrollan aún más si cabe, y aunque las absurdidades siguen a la orden del día, en este volumen también se exploran los viajes espacio tiempo, lo cual le da un toque más de ciencia ficción, detalle que se agradece. Mi parte favorita de lejos son los viejos nuevos fiordos y la placa que hay allí, seguida de cerca de la nave totalmente negra. Al igual que con el libro anterior, este volumen también acaba abruptamente, por lo que nunca hay un final propiamente dicho, así que sospecho que toca leer la tercera, la cuarta, y la quinta parte para saber si la respuesta ultima no es un número. |