Agramonte. de Yolanda Camacho
—No me gusta nada de nada cuando vienen técnicos u obreros a casa para hacer algo. ¿Sabe usted por qué? Casi todos tienen algo en común y es que cuando les dices que no quieres que toquen algo, o que no entren en una habitación, siempre acaban haciéndolo.
|