Tatiana Mier

Por eso te pido que no olvides nunca que durante un tiempo nosotros lo fuimos todo. Y repítemelo. Mil veces, repítemelo. Hasta que no me quede otra opción que recordarlo de nuevo. Porque te prometo que un día yo también lo haré.

«Lo importante es quién soy desde que tú llegaste a mi vida».

Supongo que, quien más, quien menos, todos tenemos miedo a perder. Lo que sea que creamos que podamos perder.

La vida está plagada de momentos a destiempo. Quizás, en breve, vuelva a llegarte ese instante exacto en el que parece que todo encaja de nuevo.

La edad no son solo los años que cuentas en el calendario, sino todos los que te echas a la espalda. Y esos años, a veces, suman incluso más.

Cicatrizaste todas las heridas abiertas y derrumbaste mis defensas, arrancando, una a una, todas las espinas con las que me había vestido.

Si sigues cerrada en banda, si no permites que te demuestre lo que tenga que demostrarte, al final se irá.

Me pregunto por qué desapareciste de mi vida, si parecía que querías que me quedara. Si incluso tú, parecías querer hacerlo.

No lamentes nada. La vida esta plagada de momentos a destiempo. Quizás, en breve, vuelva a llegarte ese instante exacto en el que parece que todo encaja de nuevo.

A veces, nos protegemos del dolor de los modos mas absurdos que encontramos...

Quizá yo no me había atrevido a quererla , pero ella parecía haber aprendido a hacerlo sola.

Para aceptar lo que nos sucede hay que aprender a perdonar.

Borraste todas nuestras despedidas de mi memoria, convirtiéndolas en nuevos principios.

Mis sueños de princesa los enterré con las películas Disney