Destrózame de Tahereh Mafi
Odio el displicente hastío de un sol demasiado preocupado consigo mismo como para percatarse de las horas infinitas que pasamos en su presencia. El sol es una cosa arrogante, siempre deja atrás al mundo cuando se cansa de nosotros. La luna es una fiel compañera. Nunca se va. Siempre está ahí, observando constantemente, conociéndonos en nuestros momentos luminosos y oscuros, cambiando siempre igual que nosotros. Todos los días es una versión diferente de sí misma. A veces débil y lánguida, a veces fuerte y llena de luz. La luna entiende lo que significa ser humano. Incierta. Sola. Con cráteres de imperfección. |