La campana de cristal de Sylvia Plath
Donde quiera que estuviera sentada - en la cubierta de unbarco o en la terraza de un café en París o en Bangkok - estaría sentada bajo la misma campana de cristal, agitándome en mi propio aire viciado.
|
La campana de cristal de Sylvia Plath
Donde quiera que estuviera sentada - en la cubierta de unbarco o en la terraza de un café en París o en Bangkok - estaría sentada bajo la misma campana de cristal, agitándome en mi propio aire viciado.
|