Voces de Chernóbil de Svetlana Aleksiévich
Los primeros días… Agarré a mi hija y salí corriendo a Minsk, a casa de mi hermana. Y mi hermana, una persona de mi misma sangre, no me dejó entrar en su casa porque tenía un niño pequeño y lo estaba amamantando. ¿Se imagina? Pasamos la noche en la estación.
|