El oráculo oculto de Rick Riordan
Por primera vez en cuatro mil años, canté sobre mis defectos. Desahogué la culpabilidad que me despertaba la muerte de Dafne. Mi fanfarroneria, mi envidia y mi deseo habían sido su ruina. Cuando ella huyó de mi, debería haberla dejado ir. En cambio, la persegui implacablemente. La deseaba y pretendía que fuera mía. Y por esa razón no le dejé alternativa. Para escapar de mi, sacrificó su vida, se transformó en un árbol y dejó mi corazón marcado para siempre. Pero era culpa mía. Me disculpe en forma de canción. Suplique el perdón de Dafne. |